Inversiones seguras para tiempos inciertos

El objetivo último de todo inversor es encontrar un activo que le garantice al mismo tiempo un retorno relativamente rápido de la cantidad invertida y una gran seguridad a medio o largo plazo. No obstante, si tratamos de aplicar esta máxima en la actualidad, nos encontramos con un panorama bastante poco alentador.

La política de bajos tipos de interés aplicada por los bancos centrales no ha mejorado significativamente el consumo y la inversión, pero sí que ha hundido la rentabilidad de muchas operaciones financieras. En este contexto, el inversor está obligado a localizar activos que esquiven esta tendencia sin asumir grandes riesgos. El mercado inmobiliario le aporta soluciones.

El alquiler comercial, una garantía de rentabilidad

Cada vez son más los inversores particulares e institucionales que se decantan por adquirir propiedades para su posterior arrendamiento como local comercial, especialmente por parte de grandes cadenas. A todos nos vienen a la cabeza ejemplos de superficies cuya salud económica está fuera de toda consideración incluso en los contextos más lesivos, como Zara, H&M, Mediamarkt o Decathlon entre otros ejemplos igualmente notables.

El inversor inmobiliario tiene aquí un verdadero filón para garantizarse la percepción de rentas regulares, de gran cuantía y prácticamente aseguradas, como si de un depósito se tratara.

Las ventajas de este tipo de inversión son muy variadas. Primero, el propietario (sea un particular o un fondo de inversión) difícilmente podría encontrar un arrendatario más fiable que estas primeras marcas.

Segundo, las campañas publicitarias y la actividad comercial misma contribuyen a dotar de una gran visibilidad al local, lo que puede despertar el interés por parte de otras compañías e iniciarse una lucrativa puja por el recinto.

Tercero, los alquileres que se fijan para este tipo de superficies se prestan a múltiples tipologías, pudiendo incluir una parte variable que haga propios los beneficios de la cadena.

Los inmuebles más interesantes

Lógicamente, no todas las propiedades urbanas participarían de las posibilidades de este tipo de alquileres. Hablamos de una serie de inmuebles cuyas características los hacen especialmente apetecibles para las marcas.

En primer lugar, el futuro local comercial ha de estar ubicado en un punto estratégico que facilite el acceso del mayor número de clientes posible. Hablamos, entre otros emplazamientos, de grandes avenidas y de zonas con fuerte presencia de tiendas. Las zonas más céntricas de las grandes ciudades reúnen estas condiciones, por lo que serían la localización perfecta para realizar este tipo de inversiones.

De igual modo, algunas cadenas de gran tamaño prefieren ubicaciones más específicas, en el área metropolitana de las ciudades. Tal sería el caso de las superficies de material deportivo o incluso de supermercados de gran tamaño, que pueden abrirse tanto en el corazón de las urbes como en los numerosos polígonos industriales circundantes.

En este caso, las empresas valoran notablemente el acceso directo desde de la autovía, que permite que los consumidores más alejados puedan desplazarse cómodamente en coche. Sea como sea, todas estas oportunidades requerirían de propiedades de gran tamaño o, como mínimo, de fincas urbanizables.


Una amplia selección de ofertas de venta y alquiler tanto de particulares como de profesionales inmobiliarios de propiedades de prestigio, activos inmobiliarios singulares, fincas y casas rústicas, así como hoteles con encanto y casas rurales.

Nuestro objetivo es ser un punto de encuentro a nivel nacional e internacional de segmentos de mercado interesados en propiedades y edificios emblemáticos, participando activamente en la localización de posibles compradores o inquilinos para facilitarle un contacto directo y personal con el comprador, y no actuar como un portal más, si no que configurarnos como su socio estratégico para proporcionarle un servicio integral adaptado a sus necesidades de comunicación y posicionamiento en el mercado.